martes, 3 de febrero de 2015

LA MANZANILLA 1.- BODEGA LA CIGARRERA - SANLUCAR D.B.

El renacimiento económico vino de la mano de las emergentes empresas bodegueras que iniciaron el exitoso desarrollo comercial de la crianza de vinos y producción de licores, actividad económica que permanece hasta nuestros días.  Sanlúcar se encuentra dentro de la denominada ‘zona de crianza’ del Jerez. La MANZANILLA es el vino propio de Sanlúcar y es uno de los tipos de vino de Jerez más representativos. En las bodegas sanluqueñas se elabo-ran, además de la Manzanilla, todos los tipos de vinos que forman la gama del Jerez, tales como Amontillados, Olorosos, Palos Cortados, Moscateles, Creams, así como Brandies y Ponches. 

Recientemente se están comercializando excelentes vinos jóvenes de mesa que siguen unos cuidados sistemas de selección y una esmerada elaboración.
 Situada  en pleno centro histórico de Sanlúcar, justo en el límite que divide  el Barrio Alto del Barrio Bajo de la ciudad, “La Cigarrera” es una bodega de Crianza y Expedición con una superficie total de 1.637 m².

Consta de tres naves de crianza (Bodega de Colóm, Bodega de  Cabral y Bodega de Sarnilla) que se distribuyen alrededor de un bonito patio central andaluz.  Hasta 1998, la bodega se dedicó exclusivamente al negocio de Almacenista  de vinos, siendo a partir de ese año, tras ciertas reformas operadas en el Reglamento de la Denominación de Orígen, cuando se  inicia la comercialización de sus propios vinos embotellados, bajo la marca “La Cigarrera”.


Amparada por las Denominaciónes de Origen “Jerez-Xérès-Sherry”  y “Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda”, “La Cigarrera” es una bodega de Crianza y Expedición donde las normas tradicionales empleadas durante el proceso de crianza y envejecimiento de sus vinos son aplicadas de forma estricta.